Circo de los Sueños

Asumir otro papel, dejar atrás la vida cotidiana y entrar en el mundo del circo, de la fantasía y de los sueños. Un mundo en el que puedo ser todo lo que yo quiera, fuerte como un elefante, valiente como un acróbata, hábil como un malabarista, gracioso como un payaso o seguro de mí mismo como un director de circo.

En el circo cada uno encuentra sus fortalezas y debilidades, sus intereses y talentos. Por eso para los niños y niñas de la fundación fue muy fácil dedicarse con mucha devoción al tema y organizar un espectáculo teatral.

Durante cinco sábados el aula de la fundación se convirtió en una pista de circo muy diversa.

Con juegos, canciones y ejercicios acrobáticos, payasos, domadores de animales, malabaristas mágicos surgieron ideas que se convirtieron en actuaciones individuales y finalmente en un programa de circo para los demás.

Como los participantes de un circo, los niños y niñas de la fundación también trabajaron juntos, aprendieron a contraer compromisos, tener perseverancia y ambición y confiar en su equipo. 

El motivo de este proyecto es que los niños y niñas presenten un buen trabajo sin la presión de los profesores y los padres y que puedan dejar correr libremente su creatividad.En vez de ser remunerados con notas los participantes del proyecto circense recibieron un fuerte aplauso en la fiesta, donde además había aperitivos, juegos y animación.